domingo, 13 de enero de 2013

Reflexiones de Cattiaux sobre Egipto y el origen del cristianismo




“Siempre he pensado que los libros de Hermes eran muy antiguos. La revelación de Jesucristo no es más que la renovación del secreto olvidado de Dios. De esta forma cada profeta mantiene la revelación y cada adepto revelado la renueva para la salvaguarda de los pueblos, pero siempre es el mismo secreto, aunque los símbolos y los ritos puedan cambiar. El problema es que los sectarios, más o menos ignorantes de la nueva revelación, creen que son los primeros en conocerla, lo que es cómico si tenemos en cuenta su antigüedad.
Te recomiendo el estudio atento del rito de Osiris, para que conozcas el origen del rito cristiano y la originalidad de la encarnación divina, el misterio de la muerte y resurrección de Dios hecho hombre. Desgraciadamente pocos cristianos, entre los más instruidos, conocen esta antiquísima religión en la que Cristo fue instruido durante su estancia en Egipto.
El “Libro egipcio de los muertos” e “Isis y Osiris” de Plutarco son muy interesantes para estudiar el origen del cristianismo. Isis, Osiris y Horus forman una trinidad muy parecida a la que conocemos y la pasión y resurrección de Osiris son muy sorprendentes en muchos aspectos. ¿Por qué tanto ruido alrededor del Oriente hindú y nunca una palabra sobre la fuente egipcia?
Osiris es el Cristo eterno, antiguo, presente, futuro y único, que vuelve a encarnarse y enseña el camino del eterno retorno al Padre cuando los hombres se extravían demasiado en el exterior, en el mundo.
Los egipcios, ciertamente, conocieron toda la verdad y no casi toda la verdad.
¡Ay! Sin embargo, todo esto es vano si nosotros mismos no poseemos esta verdad sustancial, viva, divina e inmortal. Todo lo demás es una discusión estéril, inútil, si personalmente no nos esforzamos en penetrar los textos de los maestros elegidos y si no conseguimos realizar esta obra divina y natural, que nos salvará de la muerte.
Los cristianos han ignorado voluntariamente al Cristo histórico que no casaba con el mito de Osiris, al que se debería restaurar por encima de todo, pues ahí está la gran revelación y el primer resucitado. El estudio del mito de Osiris te dará, ciertamente, la llave del misterio crístico, y ningún otro. Por ello permanece tan cuidadosa y voluntariamente ignorado por los cristianos actuales que, vanidosamente, creen ser los primeros, mientras que probablemente son los últimos en haber recibido la revelación del conocimiento operativo de una forma velada, aunque muy evidente.
¿No querrías concentrar en una página escrita las condiciones para la iniciación de los pieles rojas y a continuación añadir las de Jesucristo? Será muy curioso y muy instructivo. Habría también que cotejar lo que dicen y lo que hacen Osiris, Ahura Mazda, Krishna, Asclepios, Atón Ra, etc. Te pido este trabajo de confrontación a propósito de Osiris, de Cristo y de los otros hijos de Dios, a fin de tener un tema de meditación para dar a todos esos cristianos orgullosos que me echan en cara la sangre de Cristo, sin sospechar siquiera de qué se trata, y que me hablan constantemente de la verdad de Jesucristo y de la falsedad de los otros hijos de Dios, lo que proviene de un sectarismo y de una ignorancia penosos y ciegos al máximo. Las buenas intenciones, la sinceridad y la borrachera no pueden de ningún modo excusar la ignorancia”.

“Florilegio epistolar”
http://www.lapuertaonline.es/bifctgen.html

No hay comentarios:

Publicar un comentario